Este paseo marítimo de siete kilómetros es donde se reúne toda la ciudad en Nochevieja. Al caer la tarde, familias, amigos y viajeros llenan el paseo de risas y música. Los puestos de comida sirven crepes, churros y chocolate caliente. A medida que se acerca la medianoche, todas las miradas se vuelven hacia el horizonte mientras el cielo estalla en un espectáculo de color. Trae una botella de prosecco, un pañuelo y tu cámara.


































































































